En el post anterior te decía que dentro de casa puedes encontrar material abundante con el que elaborar tu propio banco de texturas.
Te voy a mostrar un ejemplo sencillo… unas texturas creadas a partir del motivo que decoraba una caja vintage de la que me enamoré.
Con ella y algunos elementos más compuse un sencillo bodegón, saqué unas fotos y, tras seleccionar la que más me gustaba, me dispuse a editarla. Más abajo te la enseño… También saqué una foto del motivo decorativo de la caja; con ella elaboré estas tres texturas que te presento a continuación…
Pues bien, he vuelto a editar la anterior fotografía para ti, aplicando una de las texturas… Fíjate ahora en el díptico con el “antes” y el “despúes”…
Como, quizás, no lo aprecies suficientemente, te voy a acercar un poquito más la versión con textura…
Y, por supuesto…., mira la preciosa cajita y descubre de dónde saqué las texturas que, como no podía ser de otra manera, te dejo para que puedas descargarlas y utilizarlas … Un placer, como siempre!!!